El africano tiene muy vivo el sentido de la música, de la danza y de la fiesta. El viejo tam-tam de África despierta en él el ritmo y acelera su sangre. Muchas veces me pregunto por qué tienen los africanos tanta pasión por el ritmo, la danza y el canto. Por qué los niños, sin saber hablar todavía marcan ya el ritmo sobre la espalda o regazo materno. Por qué tienen todos oído musical. O por qué todos, sin tener idea musical o de solfeo, se hacen cantores y compositores improvisados.
Los africanos no ha perdido nunca el sentido festivo del hombre. Sin duda guardan más fresca que nosotros la fantasía y la improvisación. El culto al trabajo y al rendimiento nos han hecho perder la alegría de vivir. Ellos están más cerca de la naturaleza. Viven inmersos en ella, mecidos por sus ritmos o azotados por sus furias.
No hacen falta ser especialistas para penetrar en el misterio de su música y ritmos. Es una música de acordes plenos, de sonidos armónicos; melodías de escasa extensión en la escala musical. Apenas sobrepasan la quinta y rara vez llegan a la octava.
El africano canta a todo y en todas las circunstancias. Los sucesos más solemnes como los más ordinarios de la vida del grupo: el nacimiento de un nuevo ser en el clan, la admisión de un miembro en la vida plena de la comunidad por los ritos de iniciación, el matrimonio que vitaliza y continúa el grupo clánico, la muerte que conduce definitivamente a la aldea feliz de los antepasados. Hay cantos de guerra, de caza, de agricultura, rituales ( nacimiento, iniciación, matrimonio, funerales), a los antepasados, al Dios Supremo...
INSTRUMENTOS MUSICALES:
El instrumento de comunicación más original es el tam-tam. El Tam-Tam es un ser vivo que habla y rima todos los acontecimientos familiares clánicos, toda alianza o relación con los grupos vecinos, todo el culto a los antepasados. El tam-tam sería un instrumento "idiófono" o instrumento musical con resonancia arrancadas de su mismo cuerpo ( tronco de árbol vaciado en su interior, con una estrecha hendidura longitudinal que se golpea con unos bastones o batutas).
Los tambores serían los "membranófonos" o instrumentos con vibraciones a través de una membrana musical de aire, de cuerda o de percusión; como sonajas, flautas, trompas, silbatos, xilófonos, arpas, liras, cítaras...
UN MATRIMONIO EN VARIOS ACTOS
El matrimonio africano se realiza en varios actos y con muchos actores, sin poder asegurar que los novios sean siempre los protagonistas. Los pasos de este importante proceso en la vida de las sociedades bantúes es el siguiente:
-El noviazgo.
-Primer acto: el consentimiento de los parientes de la novia.
-Segundo acto: fijación y entrega de la dote.
-Tercer acto: Consentimiento mutuo definitivo.
-Consejos y bendición final.
En la sociedad Sidamo, el proceso matrimonial es más largo:
1.- Información sobre el "background familiar"
2.- El pago de la dote matrimonial.
3.- El traslado de la esposa: acompañamiento de la esposa.
4.- El recibimiento de la esposa y el banquete de matrimonio.
5.- La circuncisión de la esposa.
6.- La reclusión de la esposa.
7.- El primer encuentro sexual.
8.- Inserción o introducción de la esposa en la familia.
9.- El emparentarse con la familia de la novia (fitomma)
10.- La parte de la herencia (iqqa) con la construcción de la nueva cabaña y el padre del novio divide pare de la hacienda para su hijo.
11.- La petición por parte del clan con la entrada del esposo en el clan y el rito de confirmación de la esposa en el clan del marido.
TRANSFONDO DEL MUNDO MÁGICO
Preguntémonos ahora porqué los africanos son supersticiosos ¿Cual es el trasfondo de su mundo mágico?
Para el africano el universo no está muerto, es dinámico, está poblado de fuerzas misteriosas, "supranaturales", fuera del cauce normal en que fluye la vida del hombre y del grupo. Estas fuerzas luchan unas contra otras. Pueden sumarse, aumentar o disminuir y pueden influir en los humanos para el bien o para el mal. Captar esas fuerzas, conjurarlas o manipularlas, constituye el mundo mágico. Ahí radica el secreto y el poder de esos seres privilegiados y temibles, que se llaman hechiceros, reveladores o brujos.
Veamos ahora a los protagonistas en acción: hechiceros, brujos y adivinos: hombres con un poder y una inteligencia superiores a los demás mortales. Capaces de controlar esas fuerzas oscuras, de dominarlas y ponerlas al servicio o ruina de los hombres.
EL HECHICERO: Es el personaje más representativo del mundo mágico. Ni bueno, ni malo. Respetado y temido al mismo tiempo. Posee un poder suprahumano, que va a emplear según los deseos de su cliente de turno. Ejerce su actividad en los campos más variados: enfermedad, desgracia, venganzas, prevención de peligros.
Quizás ante la sociedad, la imagen más familiar del hechicero sea la de "Curandero". Detrás de cada enfermedad o desgracia hay algo más que una causa física o mera coincidencia. Hay un poder maléfico que introduce los agentes patógenos en el organismo enfermo. Su primer esfuerzo será descubrir el verdadero agente de la enfermedad: un brujo, un antepasado...y por qué tal enfermedad es objeto de sus iras. Solamente después de una terapia religiosa, tendrán valor los fármacos naturales, de los que son grandes conocedores. Y así tenemos al hechicero convertido de golpe en protector, adivino, psiquiatra, sacerdote y médico. Cinco funciones que enaltecen su figura.
EL BRUJO: Es la personificación misma del mal. Es la suya una fuerza maléfica. Es un devorador de hombres; no es una antropofagía física, sino imaginaria pero real y terrible.
La brujería es un estado permanente y constitucional. El brujo lo es para siempre y su poder maléfico está constantemente en acción, buscando nuevas víctimas. No emplea amuletos o medios especiales, como el hechicero. Un simple deseo, un gesto o una palabra desencadenarán las furias del mal contra sus víctimas. Pero en secreto normalmente se sirve del veneno para eliminarlas.
Se puede ser brujo por nacimiento o por herencia, como un terrible sino que cae sobre tí, aún sin saberlo. Por inicación: el maestro brujo inicia a su alumno en la utilización de un fetiche para conseguir sus fines. Esta categoría de brujos necesita del feticho para actuar y corren el riesgo de ser descubiertos. En una sociedad escamada de tantas venganzas y brujerías, existe la verdadera caza del brujo.
EL ADIVINO: Reverso del brujo, es un protector de la sociedad. Su misión es descubrir esas fuerzas mágicas maléficas que actúan sobre el individuo o el grupo y revelar el origen de las desgracias que los aquejan.
Aunque no emplea fetiches, dictamina después de haber auscultado las fuerzas mágicas a través de objetos adivinatorios ( sacará las entrañas de una gallina blanca para su análisis clínico, o bien escribirá a los muertos cartas requisitorias o escudriñará el cielo como un astrólogo...).
Los hechiceros, brujos y adivinos juegan un papel enorme en la vida de la sociedad africana. Cada clan, cada linaje y casi cada poblado tiene a su hechicero o al menos a su curanderos. "Los curanderos-hechiceros son el bien más preciado que poseen las sociedades africanas y su ayuda más eficaz" dice J.Mbiti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario